- Lo sentimos. Usted no
podrá trabajar en este país.
- ¿Por qué? ¿Falta algún documento?
- Los documentos están
bien.
- ¿Entonces?
- Es usted, no puede.
El Sistema dice que no puede.
- Y cómo es posible, si
ya me dieron el trabajo.
- Usted está en códigos
rojos… por colombiano.
- ¡Ah! entonces si
fuera gringo ésto
no pasaría.
- Usted lo ha dicho.
- No sea malparido.
Cómo voy a vivir entonces acá.
- Lo sentimos, es imposible. Es orden de la
Cancillería repatriarlo.
- Cómo así, Eso no lo
pueden hacer. Estoy legal.
- El reporte se hará en
el transcurso de la semana. En días hábiles le notificarán la baja en su
trabajo y su cita en estas oficinas para proceder con la deportación.
- ¡Cómo así! Yo vine a registrar
mi estancia como empleado. Ustedes no pueden hacerme esto.
- Lo sentimos, son las
reglas. Puede consultar en la página web las políticas migratorias del Gobierno
sobre Imagen Nacional en el exterior. Ahora, retírese… por favor.
- No. Quiero hablar con
el embajador. Esto es injusto.
- El señor embajador de
Colombia no lo atenderá. No es su trabajo. Su país está en códigos rojos,
comprenda. Retírese… por favor, y preséntese a estas oficinas cuando sea
llamado para la
deportación.